
El ejercicio y el alcohol no son afines.
Muchos programas profesionales para el tratamiento de alcohol y rehabilitación de drogas incluyen el ejercicio como parte de un programa global para ayudar a los pacientes a mantener la abstinencia y desarrollar un estilo de vida más saludable.
Muchos centros de tratamiento residencial tienen instalaciones de ejercicio totalmente equipadas.
El ejercicio y alcohol son como el agua y el aceite
Tradicionalmente, la razón principal por la que se ha recomendado el ejercicio para aquellos que tratan de dejar el alcohol y las drogas es porque los mantiene enfocados en algo más que sus síntomas de abstinencia o antojos.
Ahora, sin embargo, puede haber evidencia de que el ejercicio tiene beneficios adicionales para aquellos que quieren evitar la bebida y las drogas.
Ejercicio para dejar el alcohol – Las investigaciones demuestran que funciona
El Instituto Nacional sobre el Uso Indebido de Drogas (NIDA) ha asignado 4 millones de dólares a la investigación científica para explorar un posible papel de la actividad física en el uso indebido de sustancias y la prevención de las recaídas.
Para dar aval a los fondos, la Directora del NIDA, Nora Volkow, citó dos estudios que han demostrado que el ejercicio es beneficioso.
En uno de ellos, los adolescentes que hacían ejercicio por día tenían la mitad de probabilidades de no fumar cigarrillos que sus homólogos sedentarios, y un 40% menos de probabilidades de experimentar con marihuana.
En otro estudio, las mujeres que estaban en un programa para dejar de fumar duplicaron sus probabilidades de dejar de hacerlo al agregar ejercicio a sus rutinas tres días a la semana, en comparación con las mujeres del estudio que no hicieron ejercicio .
También tuvieron un menor aumento de peso.
Si el ejercicio puede ayudar a las personas en centros residenciales y también a los sujetos sometidos a tratamiento en los estudios científicos; significa entonces que también se puede ayudar a cualquiera individuo que intente dejar de beber y drogarse y se esfuerce por mantener la abstinencia.
El ejercicio y alcohol es algo a lo que todo el mundo tiene acceso.
No es necesario convertirse en un atleta de clase mundial para disfrutar de los beneficios del ejercicio como parte de tu recuperación.
No es necesario inscribirse en un gimnasio profesional, contratar un entrenador personal o comprar equipos costosos, pero estas opciones también pueden ser beneficiosas.
Ejercitarte es algo que puedes hacer por tu cuenta. Solo recuerda que el ejercicio y alcohol no son afines.
Antes de iniciar un programa de ejercicios debes hacer lo siguiente
No todo el mundo está lo suficientemente sano como para lanzarse a un régimen de ejercicio en ciernes.
Si no has hecho ejercicio últimamente y has sido sedentario por más de un año, necesitas ver a tu médico y hacerte un chequeo antes de comenzar cualquier programa de ejercicio.
Si tienes alguna condición médica, como enfermedades cardíacas, diabetes o presión arterial alta, sin duda tendrás que consultar a tu médico antes de empezar a hacer ejercicio.
Además, si estás embarazada, tienes dolor de espalda o cuello crónico o te estás recuperando de una lesión, consulta primero con tu médico.
Actividades para prevenir el consumo de alcohol y tabaco
A veces la parte más difícil del ejercicio es empezar. En internet existen sitios web muy profesionales con algunos buenos consejos acerca de cómo motivarse para hacer ejercicio.
También señalan cómo beneficiarse del ejercicio de bajo impacto, especialmente si se es principiante.
Visita el siguiente sitio para saber más
a) Caminata por la salud
Caminar es una forma de ejercicio que casi cualquier persona puede hacer y puede tener beneficios significativos, no sólo para la salud cardiovascular, sino también para la pérdida de peso.
Si caminar no es suficiente ejercicio para mantenerte interesado, correr o trotar es otra opción que puedes hacer sin un montón de equipo o pertenencias costosas.
b) Opciones de ejercicio de bajo costo
También puedes participar en otras formas de ejercicio efectivas y de bajo costo.
Los siguientes sitios te pueden proporcionar la información que necesitas para comenzar con estas actividades físicas beneficiosas.
Hacer ejercicio elimina el alcohol y revitaliza
La relajación, el ejercicio y una mejor nutrición pueden mejorar la salud física y emocional de las personas que se recuperan del alcoholismo o la drogadicción y a su manera ayudan a prevenir las recaídas.
Afrontémoslo: Si progresaste hasta el punto de buscar tratamiento profesional o rehabilitación para el problema del alcohol o las drogas, es probable que no estuvieras haciendo mucho ejercicio y definitivamente no estuvieras comiendo tan saludable como deberías.
La mejora en estas áreas puede contribuir a un estilo de vida más saludable y puede ayudar a mantener la abstinencia.
a) Relajación y recreación
Participar en actividades recreativas o físicas puede beneficiar tu recuperación, ya que la reducción del estrés puede ser un factor desencadenante de una recaída.
También puede ayudar a reducir el aburrimiento, que para algunos es un factor desencadenante clave de la recaída, y beneficiará emocionalmente al restaurar el sentido de equilibrio en tu vida.
Por supuesto, el simple hecho de aumentar la actividad te ayudará a sentirte mejor físicamente y a mejorar tu salud en general. Esto puede ayudar a tu recuperación y a disminuir la gravedad de los síntomas de abstinencia.
b) Tómalo con calma
Si no has realizado ninguna actividad física durante mucho tiempo, debes consultar a tu médico o proveedor de atención médica antes de comenzar cualquier programa de ejercicios.
Activarte físicamente no significa que tengas que empezar a entrenarte para convertirte en un atleta de clase mundial.
Puedes simplemente dar una caminata diaria en tu vecindario o en el centro comercial, llevar a tus hijos a jugar en el parque, andar en bicicleta o elegir un deporte que alguna vez disfrutaste como el tenis, el béisbol o el baloncesto.
El objetivo es estar más activo a un nivel en el que te sientas cómodo y progreses en la mejora de tu salud.
c) Malos hábitos alimenticios
La mano de la actividad física en el desarrollo de un estilo de vida saludable es la buena nutrición.
Si eres como la mayoría de los alcohólicos y adictos, que pasaron tanto tiempo con su droga de elección es seguro que no te hayas alimentado adecuadamente.
Las investigaciones demuestran que muchos alcohólicos sufren de algún grado de desnutrición.
Muchas de las drogas en la calle hoy en día suprimen el apetito. En consecuencia, muchas personas que entran en programas profesionales de rehabilitación de alcohol y drogas se han saltado muchas comidas simplemente porque no sienten hambre.
Ejercicio y alcohol mas nutrición = Recuperación
El ejercicio y alcohol sumados a la buena nutrición ayudarán a la recuperación, ya que disminuye los síntomas de abstinencia que se podrían experimentar en el proceso de sanación.
Lee>> Cómo prevenir el alcoholismo
Si estás en el seguimiento de un programa de rehabilitación, es probable que te pregunten sobre tus hábitos alimenticios habituales y cuánto sabes sobre la buena nutrición.
Tus hábitos actuales de alimentación se considerarán en la nueva dieta para ayudarte a comer más saludablemente y sentirte mejor en tu recuperación.
La clave es llevar una dieta equilibrada, siguiendo los principios saludables de una dieta equilibrada y la elección adecuada de los diferentes grupos de alimentos: carne, aves y pescado; productos lácteos, frutas, verduras, pan y cereales.